David Crejo, socio de una empresa informática de Mérida, robó las imágenes de contenido sexual del ordenador del abogado ngel Acedo, y lo hizo por venganza. Estos son los aspectos fundamentales recogidos en un auto del Juzgado número 4, al que ha tenido acceso EL PERIODICO, sobre el caso de las fotos difundidas por internet, un asunto que, desde que salió a la luz en agosto, ha suscitado una verdadera tormenta política y social en Mérida. David Crejo hizo esa confesión a la Guardia Civil cuando fue detenido el 15 de octubre. Dató el robo el 14 o el 15 de julio y lo cometió aprovechando que se encargaba del mantenimiento del sistema informático del bufete de Acedo.

El auto citado lleva la misma fecha en que fue detenido Crejo, y en él no se hace referencia a que los vídeos y las fotos de la concejala de Hacienda Gloria Constantino y de la presentadora de Telemérida María del Mar Pérez de las Heras fueran un montaje. Sí mencionó que mantenía malas relaciones con Constantino, de lo que cabe deducir, como se ha dicho, que el móvil del caso ha sido la venganza. En este sentido es preciso destacar que la empresa en la que trabaja Crejo tiene planteada una demanda contra el Ayuntamiento. En ella se exige una indemnización de 300.000 euros en concepto de daños y perjuicios por haber rescindido unilateralmente el contrato por el que se instalaron en la ciudad, y luego se retiraron, una docena de puntos de información turística.

El acusado, que se haya en libertad bajo fianza, ha reconocido también que había interceptado dos cuentas de correo electrónico y correos electrónicos de Angel Acedo.

También admitió que grabó las imágenes en un cd-rom y se las llevó a su casa con la finalidad de difundirlas cuando le interesase.

En su testimonio niega, sin embargo, que fuera el autor de colgar las fotos en la red. A pesar de ello, la Guardia Civil le acusa de esa difusión en la primera página web en las que aparecieron: http//iespana.es/unsueno.

El auto judicial afirma que existen evidencias de que Crejo usó un programa ftp (utilizado para publicar las páginas en internet) para subir los vídeos a esa página. Esta operación se realizó desde el ordenador personal de su domicilio, que sólo lo utiliza él, según el auto.

DELITO Por estos motivos la juez, Esther Sara Villa, acusó a Crejo de un delito de sustracción y revelación de secretos. En un principio decretó prisión provisional al superar el delito del que se le acusa los cinco años de prisión. Pero ordenó la libertad con una fianza de 12.000 euros por carecer de antecedentes y porque el trabajo, el domicilio y la familia los tenía en Mérida.

Posteriormente el procedimiento pasó al juzgado nº 3. La titular, Carmen Romero, levantó la semana pasada el secreto de sumario. Fue silicitada por David Crejo y apoyada por el fiscal. Angel Acedo se opuso.