La Policía Nacional ha denunciado al consejero municipal Antonio Rodríguez Ceballos por golpear un vehículo policial el pasado 29 de mayo, coincidiendo con la celebración en Mérida de la reunión informal del Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea.

Esta información la desveló ayer un diario de tirada nacional fruto, según el dirigente socialista, de una "filtración interesada" con el propósito de hacer daño al PSOE y a su persona. Así lo indica el propio Rodríguez Ceballos en una nota remitida a los medios de comunicación con la que pretende aclarar lo ocurrido. En ella se reafirma en su actuación y dice tener la conciencia "muy tranquila".

Según su versión, en ningún momento profirió comentarios ofensivos contra el Cuerpo Nacional de Policía y niega que golpeara el vehículo policial. Sostiene que al ver parado frente al Hotel Mérida Palace a un furgón de la Policía que impedía la circulación de los vehículos, se acercó "y al ver que el conductor no me escuchaba ni me observaba, di dos golpes con mi mano derecha al cristal para indicarle que por favor siguiera adelante o que aparcara en el reservado del hotel para dejar paso a la circulación", ya que detrás del mismo esperaban varios coches que estaban tocando el claxon.

Acto seguido, añade, "salieron cinco policías, me rodean y se me acerca el responsable de dicho operativo diciéndome, con una actitud prepotente y de una forma poco amable, que quién era yo para indicarle que se moviera el vehículo".

Tras ser advertido de que sería sancionado por una falta en materia de seguridad ciudadana, Rodríguez Ceballos pidió al agente que se identificara con su placa o carnet profesional "y su respuesta fue, de una manera agresiva y con golpes en su pecho, como se llamaba y quien era", pero sin identificarse. Por ello, dos días después del "incidente" solicitó a la Delegación del Gobierno la anulación de la denuncia y la apertura de un apercibimiento o expediente disciplinario a dicho responsable del operativo por incumplir un artículo de la ordenanza municipal parando el tráfico sin ninguna justificación, por generar un problema de orden público y por no aceptar su petición de identificación.