La Policía Nacional de Mérida detiene a un hombre de 43 años por hacerse pasar por abogado y despachar a su clientela en la barra de un bar.

Según recoge la agencia Europa Press, el arresto se produjo el día 18 de febrero tras una operación policial, que permitió observar el modus operandi del detenido y que consistía en "dar falsas esperanzas a sus clientes" sobre demandas y otros asuntos jurídicos "que en su día no había podido resolverse".

El falso letrado hacía creer a sus "clientes" que "se podían reabrir" esos casos y "finalizarlos con éxito". Además, se entrevistaba con sus víctimas en sitios públicos, tales como bares y cafeterías, "al tener conocimiento de que no le era posible tener un despacho profesional abierto legalmente" en Mérida.

Llegado a un acuerdo, el detenido solicitaba el ingreso de cierta cantidad de dinero en concepto de depósito como fondo para iniciar los trámites necesarios ante la Administración de Justicia y otros organismos oficiales, que nunca llegaron a realizarse, "embolsándose el dinero para su disfrute personal".

Se pudo determinar que el falso abogado tenía una "cierta formación jurídica", al haber cursado parte de la licenciatura en Derecho, sin finalizarla, además de unas "extraordinarias dotes de persuasión personal gracias a su locuacidad y don de gentes", lo que le permitió "estafar a varias personas por valor de 9.000 euros" y hacerse pasar por letrado.

Practicadas las pesquisas tanto con el Colegio de Abogados como con el propio Ministerio de Educación, los investigadores certificaron que el detenido "ni era licenciado en derecho, ni estaba colegiado como letrado", lo que permitió su detención y posterior puesta a disposición judicial junto con las diligencias tramitadas.