La Policía Nacional ha desarticulado un grupo organizado en Mérida dedicado al tráfico de hachís en Mérida y las localidades próximas, una operación en la que se ha incautado de 646 bellotas que pesaban 6,3 kilos y se ha detenido a diez personas, tres españoles y siete marroquís, de las que siete han ingresado en prisión. La actuación se desarrolló los días 8 y 10 de noviembre, aunque la investigación se inició a mediados del mes pasado, informó ayer la Policía.
La operación comenzó cuando el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de Mérida comprobó que dos residentes en la ciudad, parejas sentimentales de dos hermanas, uno de ellos de nacionalidad marroquí y otro española, se dedicaban a introducir en la ciudad hachís que luego suministraban a medianos traficantes. Los agentes los identificaron y comprobaron que se trataba de un grupo delictivo perfectamente organizado.
Los jefes del grupo, los dos vecinos de Mérida cuñados entre sí, eran los encargados de cerrar la compra de hachís, recibir la mercancía, venderla entre otros pequeños comerciantes de la localidad (que adquirían entre 15 y 20 bellotas) y llevar la contabilidad el grupo. Otras dos personas, mano derecha de los anteriores, alquilaban los domicilios donde escondían la sustancia, la distribuían entre los compradores y se encargaban de cobrar. En el último escalón estaban los muleros, marroquís que transportaban el hachís desde Marruecos hasta Mérida en el interior de sus cuerpos. Los jefes pactaban la compra con su distribuidor en Marruecos y le pagaban, una vez habían recibido la mercancía, a través de empresas de envío internacional de dinero.
INTERVENCIONES Los agentes intervinieron cuando conocieron que se iban a recibir dos nuevos pedidos en Mérida. Primero, el pasado 8 de noviembre, en la calle Benito Toresano, los policías detuvieron a cuatro marroquís como presuntos autores de un delito contra la salud pública que, tras pasar por el hospital de Mérida para comprobar con radiografías que habían ingerido cuerpos extraños, expulsaron en dependencias policiales 412 bellotas, con un peso de 4.100 gramos.
Después, el domingo 10 de noviembre, detuvieron a seis personas, dos muleros con 234 bellotas de hachís, los dos jefes de la organización y los dos lugartenientes de éstos. Además, se llevaron a cabo tres registros domiciliarios, dos en la calle Benito Toresano y otro en la calle Nuestra Señora de las Mercedes, donde fueron intervenidas tres pistolas, una de ellas simulada.
De todos los detenidos, sólo uno de los jefes tenía antecedentes, todos han sido puestos a disposición judicial, quien ha decretado el ingreso en prisión de siete y ha puesto en libertad con cargos al resto.
