Un grupo de vecinos de la barriada de los Milagros mostró ayer su pesar por el poco caso que les hicieron ante las llamadas de ayuda que realizaron a varias instituciones. El objetivo era socorrer a una cigüeña que se encontraba herida y moribunda en lo alto de uno pilar del acueducto de los Milagros.

Según el relato de los testigos, observaron como una cigüeña se tambaleaba en lo alto de un pilar romano, donde se tumbó con las patas hacia arriba y sufriendo espasmos.

Fue entonces cuando decidieron llamar a varias instituciones locales y ecologistas para que la rescataran, ya que gran parte de la barriada estaba pendiente de lo que le sucedía a la cigüeña.

Se hizo de noche y nadie fue al acueducto, lo que indignó aún más al vecindario.