La escasez de las cuentas municipales está obligando al equipo de Gobierno a establecer prioridades a la hora de distribuir los fondos existentes. Buena prueba de ello es lo que está ocurriendo en la Delegación de Seguridad Ciudadana, que aún no ha podido comprar el material necesario para que la Policía Local realice los controles de velocidad y de alcoholemia al volante, así como para la investigación de accidentes, pese a que lo tenía previsto para este año.

El retraso en la compra de un etilómetro (con el que se realiza el test de alcoholemia), que cuesta alrededor de 40.000 euros, un cinemómetro (calcula la velocidad a la que circula un vehículo), cuyo precio ronda los 50.000 euros, o un furgón de atestados, unos 83.000, se debe a una cuestión de prioridades, según el delegado del área, José Fernández.

El concejal señala que prefiere destinar este dinero a la construcción de más pasos de peatones elevados, colocar más bandas sonoras para reducir la velocidad a la que transitan los vehículos en determinadas zonas para evitar accidentes, a reforzar la señalización en zonas escolares o a renovar la flota de vehículos de la Policía Local --antes de que acabe el año llegarán dos nuevas unidades, adquiridos mediante renting -- en lugar de comprar unos equipos que, por otra parte, ya están a disposición del ayuntamiento "a coste cero" y "cada vez que queremos", procedentes de la Academia de Tráfico de la Guardia Civil.

"El radar de la academia está entre ocho y nueve meses al año en Mérida", por lo que no tener en propiedad estos equipos, señala, no significa que la Policía Local no esté realizando su labor con respecto a los controles de velocidad y de consumo de alcohol al volante. Según datos facilitados por la Delegación de Seguridad Ciudadana, los servicios municipales están tramitando (no se cuentan las que se están redactando y las que notificaciones enviadas) actualmente 23 denuncias por circular a velocidad indebida, y 25 por hacerlo con una tasa superior a la permitida.

Fernández asegura que cuando haya fondos suficientes el ayuntamiento adquirirá estos equipos destinados a mejorar la seguridad en el tráfico de la ciudad. A tenor de las previsiones presupuestarias para el 2010, según las cuales se estima en un 20% la reducción de los fondos de todas las delegaciones --excepto Servicios Sociales y Educación-- parece difícil que esto pueda ocurrir el próximo año.