Eulaliense de pies a cabeza. La devoción de Luis Miguel González Aroca por la patrona de la ciudad le viene desde la cuna y a sus 24 años sigue sintiendo lo mismo por la mártir que cuando era niño. Desde el pasado año, este emeritense es el prioste de la Asociación de la Virgen y Mártir Santa Eulalia de Mérida, además de capataz del paso de la alcaldesa perpetua, que los próximos días 9 y 10 volverá a procesionar por las calles para disfrute de sus fieles.

-¿De dónde le viene su devoción por la mártir Santa Eulalia?

-Desde que era niño, de la mano de mi padre Luis Miguel González, que es el presidente de la asociación. Mi vínculo con la asociación empezó de manera más activa cuando tenía 13 años y llevaba el estandarte. Luego he sido portador, vocal de juventud y desde el año pasado prioste y capataz del paso de Santa Eulalia.

-¿Qué es la mártir para usted?

-Para mí, como para mucha gente, Santa Eulalia es lo más simbólico que tiene Mérida, ya no como figura histórica, sino por el testimonio de fe que dio. Es todo un orgullo ser eulaliense.

-¿Qué supone ser el capataz?

-Creo que es el mayor orgullo que puede tener un emeritense, porque ser el responsable de esas 60 personas que llevan a la patrona de toda Mérida es un orgullo y también una responsabilidad.

-¿Hay suficiente gente joven en torno a la asociación?

-Aunque tenemos un grupo de jóvenes importante en torno a Santa Eulalia, siempre vamos a necesitar a más. Los jóvenes tienen que tener muy claro que las puertas de la asociación están siempre abiertas para todo lo que necesiten. A través del grupo joven se están impulsando actividades y eventos para intentar atraer un poco más a los jóvenes. Ahora nos estamos vinculando mucho con los colegios trabajando con los jóvenes desde las edades más tempranas posibles hasta que lleguen a los 16 o 17 años, que será cuando puedan formar parte muy activa de la asociación.

-En líneas generales, ¿los emeritenses son devotos de su patrona?

-Creo que en su gran mayoría sí. Solo hay que ver las procesiones en las que Santa Eulalia aglutina a muchísima cantidad de gente. En el besamanos de octubre ocurre igual porque pueden asistir hasta 4.000 personas. Sí es verdad que siempre se echa en falta ver todavía más llenas las calles y más participación en las procesiones, pero en cualquier caso, no nos quejamos de la respuesta de los emeritenses.

-¿Cómo ha evolucionado en los últimos años la asociación?

-La asociación ha evolucionado muchísimo, se ha abierto a la gente y quiere seguir abriéndose más. La asociación abarca, aparte de la vertiente cultural que tiene, una vertiente devocional de las más importantes de Mérida. La vocación de esta asociación y de la junta directiva es llegar todavía más al pueblo. Nosotros tenemos muy claro que Santa Eulalia es del pueblo y tiene que estar donde quiera el pueblo. Si es necesario que sigamos yendo a las barriadas seguiremos yendo.

-¿Qué espera de las procesiones?

-Espero que todo siga siendo como hasta ahora y ver de nuevo las calles de Mérida llenas de gente en torno a Santa Eulalia.

-¿Y para la asociación?

-El futuro de la asociación creo que es muy ilusionante. Ahora hay mucha gente joven alrededor y se está trabajando mucho con los jóvenes. Esa es la tónica que debemos de llevar.