La pintora emeritense Rosana Soriano reivindica la visibilidad de la mujer en el mundo del arte con la exposición Los colores del agua , que se inauguró ayer en el patio del Ayuntamiento de Mérida, en el marco de las actividades programadas en la ciudad con motivo del Día Internacional de la Mujer. La autora considera que, "aunque ya se ha recorrido un importante camino, aún queda mucho trecho" por andar para que las mujeres artistas se sitúen "a la cabeza" del panorama de los grandes nombres de la pintura.

"Cuando nos preguntan por un pintor importante, siempre se nos viene a la cabeza un nombre masculino", dijo, por lo que se mostró muy "satisfecha" ante la "oportunidad" que el consistorio emeritense le ha brindado en esta fecha "tan importante".

La exposición está compuesta por 23 acuarelas, y la artista se inspira en los colores que toma el agua al mezclarse con los tintes, para dejar sobre el papel formas "preciosas". La muestra está dividida en base a dos conceptos que comparten entre sí su inspiración en lo "cotidiano", indicó.

Por un lado, algunas de las obras están basadas en una temática urbana, que recrea paisajes "figurativos" en unos casos, y "abstractos" en otros; mientras que la otra parte es su "gran reto personal", donde recoge su particular visión de las naturalezas muertas, plasmando sobre el papel elementos comunes en la vida diaria, como botellas, peces, búcaros, entre otros.