La empresa Extremeña de Grasas ha cumplido todos los plazos y los pasos para lograr la concesión de la Autorización Ambiental Integrada (AAI), y dice que ahora espera la decisión de la Junta de Extremadura sobre este aspecto.

Sale así al paso de las declaraciones del Grupo Municipal Popular de Mérida, que ha acusado a la empresa y al ayuntamiento de "presuntas irregularidades e ilegalidades" en el funcionamiento de la empresa, una "barbaridad", según la empresa, que insiste en que no tiene licencia porque la Junta aún no se ha pronunciado.

En este sentido, el equipo de gobierno reiteró ayer que todo se está haciendo según la normativa vigente y anima al PP a "ir a los juzgados".