La escasez de lluvias provocará posiblemente un mayor nivel de contaminación en el embalse de Proserpina, aunque no supondrá ningún problema para que los bañistas puedan utilizar estas aguas. Según el director de Salud del Area de Mérida, Eulogio González, "la contaminación será lago mayor porque no ha llovido", por lo que "se deberán limpiar más las zonas de los alrededores y habrá que poner más contenedores de basura", argumentó. En cualquier caso, considera que no habrá problemas para utilizar las aguas de baño.

Tampoco debe haber ninguna dificultad para usar las piscinas, señaló. Este año, se vigilará la calidad del agua de 57 piscinas en todo el área de Mérida y se realizarán 37 muestreos en piscinas de la ciudad. En todo caso, González explicó que ya se ha realizado una precampaña y se han tomado muestras del 15 de mayo al 1 de junio, sin que hasta el momento se conozcan los resultados.

González recuerda que deben ser los propietarios de las piscinas los que deben velar por la calidad de las aguas y que el pasado año la Junta sólo abrió un expediente y sancionó con una multa por falta grave por deficiencias en el control y salubridad de las piscinas. En este sentido, las comunidades de vecinos, los hoteles y el propio ayuntamiento deben velar porque todo esté correctamente en sus piscinas, y la Administración regional será la que se encargue de comprobar y hacer que los controles de calidad sean correctos.

En la ciudad hay 11 piscinas privadas en el área sanitaria del Urbano II (San Luis), la mayor zona con este tipo de espacios privados, debido sobre todo al boom de viviendas que se están haciendo en la zona de Las Abadías.