El portavoz del gobierno local de Mérida, Fernando Molina, anunció ayer que el pasado 31 de diciembre se materializó un acuerdo con la empresa Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), concesionaria de servicio de limpieza municipal, por la que esta ha perdonado al ayuntamiento 650.000 euros de una deuda pendiente de más 1,3 millones. A cambio, el consistorio liquidó los 710.000 euros restantes el pasado 31 de diciembre. Según explicó Molina, se trataba de medio centenar de facturas que habían quedado fuera del plan de pago a proveedores, con intereses --por el retraso en el pago por parte de la anterior corporación socialista-- que habían sido reclamados judicialmente, contando con sentencias favorables que elevaban notablemente su cuantía.

El portavoz municipal destacó que esta negociación lleva meses activa y ha sido liderada por el alcalde, Pedro Acedo, y la delegada de Hacienda, Begoña Saussol, con reuniones en Mérida y en Madrid. Al final se ha logrado que FCC accediera a una quita del 45%, frente a la mitad que el consistorio pretendía inicialmente. "Hemos estado presionando hasta el último día", señaló Molina resaltando los esfuerzos del equipo de gobierno por mejorar la situación de las maltrechas arcas municipales.