La mayor actividad profesional y cultural de Felipe Trigo en Mérida se centra en los comienzos de 1901. La iniciativa de crear un centro de instrucción y recreo ya venía gestándose con anterioridad. Se reunían en la calle Santa María número 7 principal y en esta tertulia estaban compañeros de la medicina, como Antonio Fadón y Andrés Valverde; Manuel Rodríguez, que le hizo la primera crónica a su primera novela, y Luis Moreno Torrado, con su inseparable Eugenio Macías.

INICIO DE LA SOCIEDAD La reunión, donde se le puso el nombre de Liceo, la presidió Andrés Valverde. Felipe Trigo expuso la conveniencia de que se comenzase por conocer el capital con que se contaba para instalar la sociedad, y como el presidente opinara que debía empezarse por la ley de constitución, hablaron para convencer a Felipe Trigo, sin conseguirlo, comentando Eugenio Macías: "Armonizando en breves frases los extremos opuestos pudo leer su proyecto económico, en que enumera el mobiliario y demás objetivos indispensables para instalar la sociedad decentemente, aprecia el valor de Felipe Trigo y propone como medio factible para cubrir los gastos de los mismos, un anticipo voluntario en acciones de cinco pesetas, reintegrables para la sociedad cuando tenga recursos".

En la siguiente reunión, celebrada el 17 de febrero de 1901, y nombrado presidente en funciones Antonio Fadón, se procede a leer el reglamento provisional. El doctor Felipe Trigo no estuvo de acuerdo en el procedimiento que se estaba siguiendo y expuso: "Habiendo oído a varios sujetos que al inscribir sus acciones lo hicieron violentados por las súplica amistosas de los iniciadores y partidarios de la sociedad, pedía que se anulase esta forma de obtener recursos para la instalación sustituyéndola por otra que no ocasionase protesta como la expresada".

Aunque a la mayoría de los socios no agradaba la proposición de Trigo, fundándose sólo en motivos de delicadeza, acordaron la anulación de la suscripción hecha, después de un ligero debate en la que tomaron parte Morán, Mena, Rodríguez y otros.

Se nombra la junta directiva y los presidentes de varias comisiones. La de Enseñanza la presidían Juan Sáez López, director del colegio Santa Ana, Juan Morán y Luis Moreno Torrado; la de Hacienda, Eugenio Macías, Francisco Corchero y Tomás Lancho, y la de Espectáculos, Felipe Trigo, Manuel Rodríguez y Casimiro González.

La junta directiva pidió a Felipe Trigo que manifestara cómo conseguir dinero para la sociedad que supliese las anuladas suscripciones, y no hallándose, o no queriendo exponerla, se acordó abrirlas nuevamente y por acciones idénticas.

LA PRIMERA NOVELA Felipe Trigo escribió su primera novela, Las Ingenuas , en Mérida imprimiéndose en la imprenta Corchero, "de forma muy elegante", según las crónicas. Marchó a Madrid el 15 de marzo de 1901 con objeto de ponerla a la venta. Regresó el 5 de abril muy satisfecho del éxito obtenido donde fue muy bien acogida por la crítica y la prensa.