El Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida ha generado esta edición un total de 578 empleos directos en múltiples sectores, según informó ayer el ayuntamiento. En concreto, el equipo del festival emeritense está compuesto por 90 personas (producción, comunicación, administración, técnicos, sastrería, protocolo, taquillas, limpieza, etc), a los que se suman otros 65 empleos que generan «las diferentes extensiones» en otros municipios.

En cuanto a la parte artística, que engloba espectáculos y pasacalles, supone 423 empleos directos «no solo para los vecinos de la ciudad, sino que emplea a personas que deben vivir en Mérida durante los meses de verano», indica. A estas cifras, el Gobierno local suma los empleos indirectos como servicios de catering, fabricación de escenografía, hostelería o alojamientos de compañías y personal.