La consejera de Bienestar Social, Leonor Flores, ha mostrado su apoyo a los trabajadores de la residencia de mayores El Prado tras las acusaciones de mal trato realizadas por Modesto Sández, hijo de una residente, contra quien presentarán una denuncia.

Flores manifestó ayer que Sández "lleva dando la lata durante bastante tiempo, de manera agresiva y con amenazas continuas y algunas bastantes graves", por lo que han puesto un vigilante en la segunda planta, "para proteger a los trabajadores", dijo.

Por su parte, Sández manifiesta que es incierto que a su madres, de 86 años, solo le deban realizar cambios posturales por la noche, y asegura que por prescripción médica es cada 30-45 minutos.