Las nieblas de la mártir santa Eulalia se están prolongando de forma alarmante. Frío. Niebla. Falta de lluvia.

Las cigüeñas de la plaza de España esperan acontecimientos. En la torre de la concatedral de Santa María la Mayor sólo se encuentra el caparazón. La cigüeña del ayuntamiento, que también tiene mayoría absoluta en su entorno, no quiere vecinos y cuando una compañera intenta anidar en el sagrado recinto, se lo impide de forma contundente: le tira lo que trae, hasta que la cansa y se va a otro lugar menos conflictivo y peligroso y, menos politizado.

En Mérida, hasta las cigüeñas del ayuntamiento ponen su reglas y sus municipales derechos. El entorno da para semejantes situaciones. Francisco Robustillo concejal del PP quiere echar de colegio Trajano a todos los que están dentro y mandarlos al antiguo cuartel Hernán Cortés, y, como mal menor, a la Politécnica.

Juan Carlos Yuste concejal del PSOE dice, como la cigüeña del ayuntamiento, que verdes las han segado, que santa Rita Rita, lo que se da no se quita y siguen en el viejo palacio del Duque de la Roca desde 1880, ya han pasado muchos años para pensar en mudanzas. Y quieren seguir, las cigüeñas y los niños haciendo gazpacho en la plaza de España el tiempo que sea necesario.

La cigüeña que manda es hembra y la autoridad que manda en Educación también: "Eva María se fue, buscando el sol en la playa/ con su maleta de piel y su biquini de rayas". Ahí quiere mandar la consejera al concejal. ¿Cómo le sentará el biquini a Robustillo? No me lo pierdo.