El ayuntamiento acomete esta semana obras en la calle Mario Roso de Luna, en Nueva Ciudad, y lo hace para mejorar la red de saneamiento y evitar inundaciones en la zona cuando hay fuertes lluvias. Se trata de realizar una red independiente que aglutine los imbornales de la calle y los bajantes de las cubiertas de los edificios adyacentes. El nuevo ramal conectará con el colector de mayor pendiente y la red existente solo quedará para las acometidas domiciliarias.

En esta calle existe un tramo en el que la rasante no permite el desagüe natural de las escorrentías (el agua que corre por la calle), por lo que en caso de mucha lluvia la infraestructura actual no es capaz de evacuar a tiempo el agua, provocando balsas en la calzada.