Un agente de la Policía Local de Mérida resultó herido de gravedad en la noche del viernes al sábado tras ser embestido por una motocicleta a la que había dado el alto.

El accidente tuvo lugar pocos minutos después de medianoche en la avenida Juan Carlos I, a la altura del colegio Nuestra Señora de la Antigua. Según apuntan los primeros informes policiales, el siniestro se produjo cuando un coche de la policía patrullaba por La Antigua y el agente Manuel G. C., de 45 años, localizó una moto que al parecer circulaba a velocidad excesiva, sin luces y cuyo conductor, L. D. M. P., de 21 años, no llevaba casco.

El policía le dio el alto, pero en ese momento fue arrollado por la motocicleta sin que por el momento se conozcan más detalles de las circunstancias del accidente, según avanzó ayer el alcalde Angel Calle tras recibir los primeros datos de la policía.

GRAVES HERIDAS El brutal impacto provocó que el agente saliese despedido y quedase tendido inconsciente. Los vecinos presentes detectaron desde el primer momento la gravedad de su estado y avisaron de inmediato a los servicios de emergencia. Por lo que se refiere al joven que conducía la moto, salió despedido y acabó impactando contra un coche aparcado.

Ambos fueron evacuados rápidamente al hospital de Mérida, y en torno a las cinco de la mañana fueron trasladados al Hospital Infanta Cristina de Badajoz, donde continuan ingresados.

Fuentes oficiales del Servicio Extremeño de Salud explicaron que el agente está en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro pacense. Sufre traumatismo craneoencefálico con contusión frontal, traumatismo torácico y fractura abierta de tibia y peroné de su pierna derecha. Su estado es grave pero se mantiene estable.

Las pruebas realizadas ayer por la tarde permitieron descartar que sufra daños cerebrales, pero confirmaron que el traumatismo torácico le ha afectado al pulmón, por lo que permanece sedado y está recibiendo ventilación pulmonar asistida.

En cuanto al joven, tras pasar las primeras horas en Urgencias pasó a planta, donde es atendido por el servicio maxilofacial del hospital. Sufre una fractura órbitomolar y múltiples heridas y roturas de huesos en el rostro. En el primer momento los médicos temieron que hubiese sufrido algún daño interno, por lo que le realizaron un TAC que descartó daños cerebrales. Su pronóstico es menos grave.

El alcalde de Mérida, Angel Calle, pasó buena parte de la madrugada con las familias de los dos heridos y ayer mismo se trasladó hasta Badajoz.

En declaraciones a este diario, mostró su deseo de que ambos se recuperen lo antes posible e hizo un llamamiento a todas las familias de la capital extremeña para "entre todos" tratar de evitar que se repitan siniestros como este y otros incidentes que se repiten cada fin de semana.