La Junta de Extremadura no abonará la subvención concedida a la empresa de San Pedro de Mérida Hormigones y Aridos Extremeños SL hasta que no justifique las inversiones realizadas, como establece el decreto que regula el régimen de Incentivos Industriales Extremeños a la inversión.

Con esta manifestación, la Junta sale al paso de las afirmaciones del diputado del grupo parlamentario del PP, Juan Parejo, quien acusó a la Administración regional de haber concedido una ayuda de 86.290 euros "a una planta fantasma de hormigón que funciona de forma ilícita, ya que el propio gobierno regional abrió un expediente sancionador por realizar una actividad sin el informe de impacto ambiental".

Sin embargo, desde la Junta se señala que la concesión de la ayuda se hizo "atendiendo en todo momento a la documentación recogida en el decreto de Incentivos Regionales".

Parejo también criticó que la de empresa esté sobre una vía pecuaria, y no en suelo industrial, y la descoordinación de la Junta, "que por un lado dice que la empresa es ilegal y por otro le concede una subvención".

Para aclarar este asunto, el PP pedirá la comparecencia de los consejeros de Economía y de Medio Ambiente en la Asamblea.