Ampliar los espacios habilitados para las terrazas y disponer de doble licencia para ejercer la actividad hostelera. Estas son algunas de las peticiones que traslada al gobierno local la nueva Asociación de Cafeterías, Restaurantes y Hostelería de Mérida (Acareo), que integra a más de 90 establecimientos de la ciudad y que inicia su andadura con el objetivo de «defender y apoyar los derechos e intereses de todos sus miembros y, sobre todo, los del sector hostelero». El presidente del colectivo, Ángel Campos, y el secretario, Pedro Díez, se reunieron el martes con la delegada de Turismo, Pilar Amor, para darle a conocer los pormenores de esta iniciativa.

Campos explica que ya están elaborando un documento con los problemas del sector y sus posibles soluciones para trasladárselo al ayuntamiento. En esta línea, señala que los hosteleros han perdido como mínimo el 80% de sus ingresos habituales por la situación generada por el coronavirus. «Muchos compañeros han cerrado sus negocios y serán cada vez más como tardemos mucho en solucionar este tema», advierte.

Entre las demandas que trasladan al consistorio, Campos destaca la necesidad de que se permita ampliar los espacios de las terrazas de los establecimientos, principalmente en aquellos casos en que fuera posible por estar ubicados en una plaza o parque, ya que esto permitiría aumentar el número de mesas, teniendo en cuenta que la ocupación máxima permitida es del 50% en los veladores. «Son casos concretos que se pueden estudiar y facilitar mucho la supervivencia del sector», apunta.

El presidente sostiene que otra solución pasaría por conceder a los locales una doble licencia de actividad, por ejemplo, la de café conciertos y la de bar especial. «En algunas ciudades extremeñas facilitan una norma con una doble licencia y en Mérida te dicen que puedes bajar la licencia, pero eso supone un gasto importante. Los cafés concierto quieren actuar como si fueran cafeterías», puntualiza.

Sobre los bonos al consumo anunciados por el Ejecutivo municipal para la hostelería, Campos afirma que estos «han generado mucho debate porque hay compañeros que nos comentan que puede ser una gran idea y otros que no lo ven, porque cada establecimiento tiene sus peculiaridades». «No sabemos qué pasará en el futuro si hay una cuarta ola, ni tenemos una hoja de ruta, por ello vamos a fomentarla. Lo único que queremos es trabajar», subraya.