Las instalaciones deportivas municipales presentan graves deficiencias en sus infraestructuras, pero la Junta y el ayuntamiento se lanzan acusaciones de culpabilidad al respecto. Los pabellones cubiertos tienen grietas, goteras y cristales rotos, mientras que las pistas carecen del acondicionamiento necesario, según los usuarios.En la actualidad, el ayuntamiento debe mantener los pabellones Diocles, Guadiana --donde hay goteras-- y el situado en Las Abadías, además del estadio de fútbol y la piscina climatizada de La Paz, donde recientemente ha colocado una cubierta nueva.En el polideportivo Diocles, el edificio tiene cristales rotos y, sobre todo, grietas en el muro de contención, como atestigua un informe del ayuntamiento de febrero del 2002, que pone de manifiesto la "inestabilidad" del pabellón, aunque el alcalde, Pedro Acedo, responsabilizó ayer a la Junta del estado del mismo, "porque es quién lo construyó".Preguntado por si conocía éste informe, Acedo ni negó ni confirmó esta cuestión, pero señaló que "somos políticos, no albañiles y no crean que concejales ni los consejeros van viendo a ver dónde hay una grieta".Por su parte, el delegado de Deportes, Miguel Valdés, manifestó a este diario que el problema "no es de mantenimiento, sino de que se hacen mal las construcciones". El concejal respondía así al director general de Deportes, Manuel Martínez Dávila, que ayer calificó de "bochornoso" el estado de las instalaciones en la ciudad.