El gobierno regional ofrece un alojamiento «provisional» a Custodia, una mujer que ayer fue desahuciada de una vivienda social, ubicada en la calle Juan Canet, a la espera de que se adopte una «solución definitiva». Según informaron fuentes de la Consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda, la mujer estaba ocupando el inmueble de manera «ilegal». En su lugar, una familia con un menor a su cargo, que llevaba desde 2016 esperando para entrar en una vivienda social, accedió ayer a dicho inmueble.

Marisa Prudencio, de la asociación Mujeres Sembrando, explicó durante el desahucio que Custodia es una mujer de etnia gitana, que vive sola y tiene la enfermedad de crohn. Durante un año estuvo viviendo en casa de varias amistades hasta que una amiga suya la acogió en el inmueble del que ayer fue desahuciada, después de que su amiga se marchara a vivir fuera de Mérida. «Ella quería entregar la llave pero cuando se le diera una solución a su problema habitacional», añadió.

La diputada de Unidas por Extremadura Irene de Miguel también acudió al desahucio a denunciar que «Extremadura no es un territorio libre de desahucios como nos quiere vender el señor Vara», pues el desahucio de Custodia es un ejemplo de que «tenemos un sistema inhumano con una burocracia despiadada que se ceba con los más vulnerables». «No tiene ningún sentido que desahucien a esta mujer», subrayó.