El Pleno del Ayuntamiento de Mérida acordó ayer, con los votos en contra del PSOE, IU y Siex, iniciar los trámites para disolver la Empresa Municipal de Transportes (EMT), organismo que ha quedado sin utilidad tras la privatización del servicio de bus urbano y la zona azul.

El edil de Contrataciones, Daniel Serrano, recordó que la gestión de Vectalia ahorrará 1,3 millones de euros a las arcas públicas emeritenses al tiempo que se mantienen los puestos de trabajo y se presta el mismo servicio a los ciudadanos. Unos argumentos que no convencieron ni a la portavoz del PSOE, Estrella Gordillo, ni al de IU, Alvaro Vázquez. Mientras que para la primera "los números no cuadran", el segundo destaca que "han subido los precios (del billete de autobús) y empeorarán las condiciones de los trabajadores". "El servicio cuesta tres millones al año pero solo ingresa uno, y los dos restantes salen del bolsillo de quienes se montan en el autobús y quienes no", les replicó Serrano. Según informó, "lo correcto cuando se ha llegado a este punto es que se inicie la disolución y se nombre a los liquidadores", que serán él mismo y la edil Ana Blanco. Ahora habrá una auditoría y después habrá que volver a reformular las cuentas.

En el pleno de ayer también se debatió, sin éxito por la negativa del PP, una moción de los socialistas para instar al ayuntamiento a elaborar un estudio del impacto de género sobre las ordenanzas municipales y poner en marcha un plan de empleo femenino. Además, el edil de IU preguntó por una deuda de Daniel Serrano --él no especificó el nombre-- por el impago de un recibo del IBI. El propio Serrano confirmó a este diario que se trata de un problema ya subsanado por el cambio de la cuenta bancaria en la que estaba domiciliado el recibo.