El Pleno del Ayuntamiento aprobó ayer con los votos del PP la elaboración de un nuevo plan de pago a proveedores por 9,6 millones de euros. Según explicó la delegada de Hacienda, Begoña Saussol, acogiéndose al mecanismo del Gobierno, el consistorio contrae un crédito bancario para pagar las facturas de los proveedores, que obtendrán "solvencia y un poquito de respiro".

En la sesión de ayer, también en solitario, el PP aprobó la Cuenta General de 2012, que según explicó el portavoz municipal, Fernando Molina, cierra con el déficit en el 11% (antes era del 17%) y un desequilibrio financiero de cinco millones. Además, debido al rechazo de Hacienda al plan de ajuste del 2013, se aplicará una rentención de crédito de 710.000 euros en las cuentas de este año.