Antes del fiasco de este proyecto para construir un centro de ocio en el antiguo cuartel y arreglar las calles más céntricas de la ciudad, el ayuntamiento si logró la aprobación de otras dos iniciativas vinculadas al programa europeo Interreg III. En abril del pasado año, el alcalde Pedro Acedo daba cuenta de la aceptación de dos proyectos turísticos presentados por el consistorio: uno para construir un centro de recepción de turistas en una parte del antiguo acuartelamiento, y otro para recuperar el entorno del lago de Proserpina. Todo por un valor de 5 millones de euros.

Dicho y hecho. En el antiguo cuartel se trabaja en la actualidad en la construcción del llamado Museo Abierto de Mérida (MAM), un complejo turístico cultural con un edificio de 2.500 metros cuadrados, una tienda, un centro de interpretación, restaurante y aparcamientos.

En Proserpina habrá quioscos merenderos abiertos todo el año, una nueva red de saneamiento, y un centro de interpretación de la cultura del agua en la época romana.