El director del Festival de Teatro Clásico de Mérida, Jorge Márquez, considera que en la ciudad existen sectores que "van en contra de la proyección que para la ciudad supone el nombre del festival", y que "la Mérida que lo vive debería enfrentarse ordenada, educada y pacíficamente a quienes cuestionan lo que da".
Márquez realizó estas afirmaciones ayer en la puerta de la Villa, en la presentación del programa Mérida vive el festival , por el que se han instalado en las principales calles del centro una serie de carteles recordatorios de las obras que se representarán en la próxima edición, que comienza el día 30 de junio.
El objetivo del programa es inculcar entre los emeritenses un sentimiento de apego y afecto por el festival, que, según el director del mismo, Jorge Márquez, ha ido desapareciendo en los últimos tiempos entre una parte de los ciudadanos.
Jorge Márquez cree que, al mismo tiempo que el festival va alcanzando una dimensión fuera de Extremadura y de España cada vez más pronunciada, "detecto que hay una parte de la ciudad de Mérida que no está conforme con el festival".
Por otro lado, considera que el apoyo económico que recibe el festival por parte del Ayuntamiento de Mérida no es suficiente, aunque "seguramente a ellos si les parece suficiente", manifestó.
