La ciudad tiene más de 700 viviendas en malas condiciones para su habitabilidad, la mayoría de las cuales fueron construidas hace más de sesenta años, según el último informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre Censos de Población y Viviendas. El informe refleja que en Mérida hay casi 8.400 edificios destinados a viviendas, de los que 719 se encuentran en un estado entre deficiente y ruinoso.

Los datos del INE apuntan a que en Mérida hay casi un 9% de edificaciones que no están en condiciones de ser ocupadas. En concreto, del total de construcciones destinadas a viviendas, 535 (el 6,4% del total) presentan un estado deficiente, 117 (el 1,4%) tienen un aspecto malo, y 67 edificios están en ruinas, lo que representa el 0,8% del total. El resto, 7.635 (el 91,3%) tienen las características adecuadas para su habitabilidad.

Un claro ejemplo de uno de estos edificios es el situado en el número 16 de la calle Cardero, frente a la estación de Renfe, que tiene destrozados la techumbre, balcones y puerta, y cuya fachada presenta un lamentable aspecto. Además, algunas de estas viviendas en ruinas suponen un peligro para quienes transitan por sus alrededores, ya que hay casos, como el de este edificio, en el que algunos materiales pueden desprenderse de la vivienda y caer en la vía pública.

Se da la circunstancia de que la mayoría de estos edificios fueron construidos hace más de sesenta años y tienen una sola altura.

SITUACION EN LA REGION

El informe del INE indica que la situación en Mérida es prácticamente la misma que la que existe en el resto de la región, donde cerca del 90% de los edificios se encuentran en buen estado, y el resto, cerca de 3.500 viviendas, recibe el calificativo de "deficiente", "malo" o "ruinoso".

Además, la nota media extremeña es un 3,9 sobre cinco, que el estudio señala como "deficiente alto", lo que sitúa a la comunidad muy cerca del aprobado.