La Confederación Hidrográfica del Guadiana detecta la "aparición puntual" de peces muertos en el tramo urbano del Guadiana, a su paso por Mérida, que, según la confederación, a pesar de la cantidad "no son alarmantes", y existe un dispositivo de recogida para evitar acumulaciones y malos olores en el tramo afectado.

Según la agencia Europa Press, los ejemplares retirados son en su mayoría barbos de gran tamaño de los que hasta el momento se llevan recogidos más de 6.000 kilos, según informa el Ministerio de Medio Ambiente.

Así mismo, y una vez efectuadas las correspondientes analíticas de agua y de toxicología de los ejemplares, se ha podido comprobar que esta mortandad se debe a un "problema temporal de eutrofia" (propiedad de las aguas de los lagos y embalses susceptibles de un incremento de sustancias nutritivas que provoca un exceso de fitoplancton), derivado fundamentalmente del exceso de fitoplancton (microflora acuática) presente en el agua.

Puesto que no se han encontrado elementos tóxicos de posibles vertidos (pesticidas, industrias, etc) ni tampoco indicios de enfermedades u otros patógenos asociados a esta especie, es previsible que en breve este problema de mortandad cese.

El origen de este proceso de eutrofización se debe fundamentalmente al exceso de nutrientes procedentes del retorno de regadío y a las condiciones climáticas; afectando a la zona de cola del embalse de Montijo, que coincide básicamente con el tramo urbano de Mérida.

El ministerio resalta que "en todo momento" se ha estado en contacto con la administración autonómica y local para prever cualquier tipo de incidencias.