El mercadillo que cada martes se celebra en la avenida de la Hispanidad es posible que cambie su ubicación y se traslade al actual recinto ferial. No es mal lugar. Céntrico. Buen camino y más amplio que donde se encuentra ahora.
El tráfico no se corta por una importante arteria donde se circula bastante y cada mañana de los martes, de cada semana, se corta. Se evita ver la suciedad, y que quitan los servicio de limpieza lo más urgente posible. Pero algo queda. Como los Campos Cataláunicos cuando los romanos de Aecio y los visigodos de Teodorico derrotaron a los hunos de Atila. Deprimente ver el mercadillo cuando termina a mediodía.
Los productos en el recinto ferial se pueden ver mejor, no hay cuestas y sólo hay que poner en las calles por donde se circule, de forma adecuada, un riego asfáltico, como se hace en la feria. Incluso poner algunos servicios para mayor comodidad.
El lugar es también más amplio. Por lo tanto se verá mejor la ropa que venden y el griterío de las ofertas no molestará a nadie.
No todos van a estar de acuerdo, pero es eso algo muy común en esta ciudad. De estar en el mismo lugar, al nuevo emplazamiento, hay diferencias.
El PSOE dice que el ferial sea un recinto para los jóvenes. Llevan razón en decir que hay que darle participación al grupo de la oposición en este cambio y a los afectados en el mismo. Y, naturalmente, a los ciudadanos. Pero se puede alternar perfectamente el mercadillo con que sea un recinto para jóvenes.
El lugar es lo suficientemente amplio para el mercadillo y para los jóvenes.
