Mérida lleva desangrándose decenas de años. A los militares, acompañados de algún político, no les gustaba que se ubicaran en Mérida las Fuerzas Armadas. Terminaron en Badajoz. Tampoco tenemos cuartel de la Guardia Civil.

Desaparecieron industrias como el Matadero Regional, El Aguila, Cruzcampo, Hilaturas, La Casera, la Algodonera, Rumianca y La Corchera, que ahora está en San Vicente de Alcántara y se llama Corchos de Mérida.

Se ofrecieron 200.000 metros cuadrados, gratis, para la universidad. Hicieron una división salomónica: Ciencias, Badajoz; Letras, a Cáceres. De la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) se abrieron aulas en varias poblaciones de la provincia. Plasencia, que dependía de Mérida, se hizo centro independiente.

Por ley, la Delegación del Gobierno se ubicaría en Mérida como capital autonómica, pero está en Badajoz. Lo mismo ocurre con la Comandancia de la Guardia Civil.

La Plataforma Logística era para Mérida. Está en Badajoz. Solo le hemos ganado en el fútbol, llegamos a primera división. El entonces presidente, Juan Carlos Rodríguez Ibarra , dijo: "al que ascienda a primera división se le construirá un nuevo campo". ¿Subió el Badajoz? No. Pero se le construyó el Nuevo Vivero.

El Arzobispado, para no perder comba se llama Arzobispado Mérida-Badajoz. Y pese a que durante siglos estuvo en Mérida, ahora tiene su residencia en Badajoz. Don Santiago viene de vez en cuando a visitarnos.

Nada en contra de Badajoz, palabra. Nací allí. Es una ciudad que ha sabido sacarle rentabilidad hasta la calle del Burro. La Plaza Alta es un lujo. Hasta las prostitutas se han modernizado.

La asociación Mérida futuro, que fundó José Luis Ortiz Belda , exconcejal del PP, ya tiene fecha de caducidad. Tenía la mejor asociación Amigos de Mérida para la unidad de Extremadura. Ya no existe, como tantas otras cosas.