Reservas a golpe de clic, menús escaneados en códigos QR y diferentes idiomas, rutas personalizadas, hoteles que reciclan y ahorran agua e incluso una red wifi gratuita que permita al viajero estar conectado en todo momento durante su visita. Son algunas de las premisas del turismo inteligente, un nuevo concepto al que Mérida se quiere sumar para seguir avanzando en este sector clave para la economía local. Y lo hará a través de una estrategia que ha puesto en marcha la Diputación de Badajoz que pretende convertir a toda la provincia en destino inteligente, y que cuenta con un presupuesto de 2,9 millones.
La institución provincial y el ayuntamiento están manteniendo ahora los primeros contactos para el despliegue de esta iniciativa en la ciudad y según explicó ayer la portavoz municipal, Carmen Yáñez, en el mes de octubre se irán definendo las primeras actuaciones, que irán enfocadas sobre todo a entornos naturales. «No se trata tanto de invertir en los monumentos, sino en herramientas y medidas novedosas para atraer turismo», afirma. Benidorm, Almería, San Sebastián, El Hierro, León, Monfragüe o Badajoz son algunos de los puntos que ya cuentan con la distinción de destino turístico inteligente.
El objetivo de este proyecto es ofrecer un servicio competitivo y de calidad que garantice un desarrollo sostenible para mejorar la experiencia de los turistas y también la calidad de vida de los residentes. Según ha explicado ya la diputación, esta estrategia de Destino Turístico Inteligente es una de sus apuestas más importantes para romper brecha digital entre el mundo rural y el urbano, logrando así una mayor igualdad a través de las nuevas tecnologías. Por ello se trabaja para la puesta en marcha de un portal de promoción turística inteligente que permitirá a empresas y profesionales promocionarse y conectar con los grandes operadores turísticos, un portal que permitirá situar en el mapa digital cualquier pueblo, empresa o evento de la provincia.
