El Ayuntamiento de Mérida mantiene un desequilibrio financiero de 5,07 millones, según la liquidación del presupuesto del 2012 hecha pública ayer por el alcalde, Pedro Acedo, al término de la junta local del gobierno. El regidor dijo estar "satisfecho", porque a su juicio se están haciendo las cosas "correctamente", logrando reducir el desajuste desde los 7,9 millones del 2011. El déficit se queda por tanto en el 11,72%, frente al 16,12% del año anterior, si bien aún está lejos el objetivo de equilibrio fijado por el Gobierno central en la Ley de Estabilidad Presupuestaria. En total, el consistorio ingresó 43,2 millones el año pasado y contrajo compromisos de gasto por valor de 50,6 millones, si bien no todos se han saldado (por lo que el desequilibrio es menor a esos siete millones de diferencia).

El alcalde explicó que el remanente de tesorería (el dinero en caja) ha pasado de 22 millones en negativo en el 2011 a dos en el 2012, pero ha sido como consecuencia del Plan de Pago a Proveedores, mediante el que se solicitó un crédito para pagar a este tipo de acreedores y ese dinero deja de computar como deuda directa del consistorio, si bien pasa a tenerla con los bancos. En ese sentido, Acedo especificó que el consistorio debe a las entidades bancarias unos 56 millones de euros, a los que se suma unos 18 millones a proveedores y otras instituciones (por subvenciones, por ejemplo).

En todo caso, el dirigente del PP defendió su labor de "saneamiento" de la administración local y recordó en repetidas ocasiones que es el único camino posible y viene motivado por la nefasta, a su juicio, gestión del anterior gobierno del PSOE.