El museo del agua en Proserpina tiene una corta historia, pero está llena de lagunas . El centro se inauguró oficialmente el 22 de marzo del pasado año después de varios retrasos. Sin embargo, nada más abrirse para que las autoridades políticas lo visitaran y conociesen, se cerró al público por, según los responsables municipales, problemas técnicos --había que instalar un transformador eléctrico-- y falta de personal para atender las instalaciones. Después de tres meses cerrado, volvió a estar disponible en junio. Lo hizo todo el verano, pero al caer las primeras lluvias en octubre se volvió a clausurar porque había goteras. Ahora, cuatro meses más tarde, vuelve a abrir sus puertas, según el ayuntamiento.

Este desajuste es valorado de distinta manera por los grupos políticos. Así, mientras la delegada de Turismo, Gloria Constantino, destaca: "Ya está todo arreglado después de que se cerrara por algunos problemas causados por las lluvias, y se ha cambiado el de la sala de musealización"; no opina lo mismo la concejala socialista Estrella Gordillo, para la que "es un auténtico despropósito" lo que está ocurriendo con el museo.