Tiempos de cambios. Si hace poco más de un año los emeritenses decían adiós a los míticos quioscos de la plaza de España, al menos tal y como los conocían visualmente desde hacía años, ahora tocará ‘despedirse’ también de la imagen tradicional de la fachada principal del ayuntamiento, que cambiará sus franjas de color albero por el gris. Aunque se mantenga el blanco como protagonista, la percepción visual que tenían los ciudadanos ya no será la misma. Y es que, según apunta el cronista oficial de Mérida Fernando Delgado, el exterior de la casa consistorial lucía con los colores blanco y albero desde principios de los años 80.

«No está de más un pequeño cambio que tampoco supone nada del otro mundo», explica el delegado del parque municipal de Obras y Servicios, Pedro Blas Vadillo, quien destaca que «ya era hora de renovar un poco la estética del ayuntamiento para ponerla acorde a como se ha hecho en otros edificios de la plaza de España». Cabe señalar que los operarios iniciaron el pasado martes los trabajos de pintura en el exterior de la fachada principal, lo que ha llamado la atención de los viandantes porque el consistorio cambiará de aspecto tras varias décadas con la misma estética.

En esta línea, el gobierno municipal acometerá a su vez el cambio de la carpintería exterior de la fachada del consistorio para ganar en cuestiones de eficiencia energética. «No es solamente pintar, se está procediendo a reparar ciertos problemas de humedades que había», puntualiza Vadillo.

El edil sostiene que estas actuaciones se suman a otras ya acometidas en este sentido, como los trabajos de pintura que se llevaron a cabo en el exterior del conservatorio municipal Esteban Sánchez. Cuando finalice el cambio de imagen en el edificio del ayuntamiento, Vadillo avanza que se estudiarán mejoras para las fachadas del museo el Costurero, donde también se reparará la zona de la cubierta, y para la de la oficina de turismo de la Puerta de la Villa.