Los grupos de la oposición no respaldan la propuesta recogida en la documentación sobre el Estatuto de Capitalidad que el Ayuntamiento de Mérida ha remitido a la Junta, y en la que se plantea cifrar en 1,7 millones de euros el coste de los servicios que presta la ciudad por su condición de capital autonómica. El PSOE, IU y Siex, con matices diferentes, instan al consistorio a acordar primero el contenido de la futura norma, antes que hablar de cuestiones económicas. El consistorio apunta un porcentaje sobre el Fondo Regional de Cooperación, calculado a partir de la relación entre la población emeritense y la del conjunto de Extremadura, como informó este diario el sábado.

La portavoz socialista, Estrella Gordillo, insiste en buscar la "unidad con el resto de la región", para evitar las tensiones que genera abordar el asunto "solo desde un punto de vista económico". En sus aportaciones, el PSOE insiste en definir que el Estatuto de Capitalidad "no busca el beneficio ni el perjuicio de nadie", sino "facilitar el servicio que Mérida presta a Extremadura". Esta es la cuestión que debe quedar clara ante todo, argumenta Gordillo, que admite que luego será necesario fijar los criterios económicos, pero a partir de acotar los servicios que se ofrecen en áreas como la seguridad, el urbanismo o la limpieza.

Alvaro Vázquez, de IU, indica que esta formación incluye en su propuesta de estatuto un cálculo objetivo para cuantificar los gastos que implica la condición de capitalidad, basada en los estudios desarrollados por las universidades de Santiago y Santander, para desarrollar normas similares a la que ahora persigue Mérida. En su planteamiento, se tienen en cuenta la población flotante en la ciudad los días laborales, así como la cuantificación de costes de servicios como el tráfico, la limpieza viaria, la seguridad, la preservación del patrimonio histórico, etcétera.

Desde Siex, Antonio Vélez, rechaza en un comunicado que el objetivo del Estatuto de Capitalidad se "simplemente el dinero", y se desmarca de cualquier planteamiento que ponga a la ciudad "en una bochornosa posición, mendigando cuatro cuartos al Gobierno regional". Vélez recuerda que "Mérida está agradecida a Extremadura" y no puede "pasar la gorra por algo que le reporta un gran beneficio". En cambio, aboga por pretender otras cuestiones, como "la cobertura universitaria, en alto nivel"