Constancia y paciencia para conseguir los objetivos. Estas son las dos virtudes que reconoce tener como alcalde, y no sin cierto pudor, el socialista Antonio Rodríguez Osuna. En junio del pasado año logró revalidar la alcaldía de Mérida por mayoría absoluta, por lo que no debe de andar mal encaminado al analizar sus bondades políticas cuando los ciudadanos supieron apreciarlas también dándole un fuerte respaldo a su gestión. El primer edil asegura que la crisis ocasionada por el coronavirus ha marcado el primer año de su segunda legislatura, de forma que la recuperación económica de la ciudad ha pasado a ser ahora su prioridad.

-¿Qué balance hace del primer año de su segunda legislatura?

-El balance del primer año está marcado por el covid, porque han sido tres meses muy duros en la experiencia y en la vida política. Eso ha supuesto una paralización de muchas de las cosas que estaban pendientes, como proyectos industriales que estamos esperando conocer si siguen o no adelante. No obstante, por lo general el primer año de la legislatura ha sido muy fructífero porque se han ejecutado otros proyectos como las obras del María Luisa, las pistas de atletismo del Diocles, el campo de San Andrés, el derribo de la cuña o las compras de patrimonio. Esto demuestra que en Mérida no se dejan todas las cosas para el último año previo a las elecciones, porque hemos trabajado rápido y de una manera constante ya en el primer año.

-¿Considera que su Gobierno ha actuado de forma activa y eficaz ante la crisis del coronavirus?

-Sí, porque fuimos los primeros en poner medidas para el conjunto de los funcionarios y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Durante esta crisis hemos dado material de protección a residencias privadas, públicas y empresas de servicios esenciales que nos lo han pedido. Hemos atendido a todo el mundo para que pudiera desarrollar su trabajo durante la crisis del covid, por lo que en ese sentido hemos actuado de manera eficiente.

-¿Cómo valora el papel que han jugado los grupos de la oposición?

-Estoy profundamente agradecido al trabajo que ha hecho la oposición, porque hemos estado en permanente comunicación y han estado al lado del Gobierno. Ellos me han trasladado sus inquietudes e iniciativas y han estado arrimando el hombro.

-El presupuesto municipal ya se ha aprobado de forma definitiva, ¿qué va a suponer?

-Con la aprobación del presupuesto municipal entrarán en vigor gran parte de las ayudas que hemos anunciado y se publicarán las convocatorias. La idea es que a partir del 15 de julio se puedan gastar los bonos del comercio y las empresas del turismo irán recibiendo las ayudas higiénico-sanitarias. Quiero destacar que la convocatoria reconoce la inversión que hayan realizado los establecimientos turísticos desde el primer día del Estado de Alarma. Los bonos van a ser de 20 euros, con un descuento del 50% sobre la compra que se realice.

-La FEMP y usted mismo han pedido en varias ocasiones al Gobierno que permita invertir el 100% del superávit de los ayuntamientos en medidas para aliviar los efectos de la crisis. ¿Está molesto porque no se haya pronunciado aún?

-Estoy muy molesto porque todavía no se ha atendido la petición de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Sería un error político grave que el Gobierno de España no llegara a un acuerdo con la FEMP. Los ayuntamientos estamos molestos porque se nos está obligando a poner en marcha medidas de seguridad, higiénicas y de protección, y no se nos está dando dinero para hacerlo, mientras que a las comunidades autónomas sí se les está dando un fondo de 16.000 millones de euros. Vamos a tener un problema porque no tenemos dinero suficiente para atender todas las medidas que el Gobierno está imponiendo, así que o las financia el Gobierno central a través del superávit y los remanentes, o la Junta de Extremadura, porque de lo contrario no se van a poder aplicar aquí ni en ningún ayuntamiento de España.

-Por lo que dice, entiendo que el ayuntamiento no tendrá recursos económicos suficientes para atender todas las necesidades...

-El Ayuntamiento de Mérida necesitará para ello el músculo financiero del Gobierno de España o de la Junta de Extremadura. O abren la mano al endeudamiento, al límite del techo de gasto y a poder incorporar en el presupuesto los remanentes y el superávit, o va a ser imposible mantener la situación de aquí a final de año.

-¿Qué posición deben de tener las empresas de la ciudad?

-A las empresas no se les puede pedir más, porque a pesar de que han tenido muchísimas ayudas de todas las administraciones, muchas han soportado una gran tensión financiera y han tenido que cerrar. Las instituciones tenemos que ser un motor para que las empresas vuelvan a funcionar y puedan generar empleo.

-¿Cómo se plantea el verano para el turismo emeritense?

-Mérida cuenta con una ventaja que no tienen muchas ciudades de este país y es que este verano el turismo va a ser muy nacional, en el que la cultura y el patrimonio van a jugar un papel fundamental. Además, tendremos como acompañamiento el festival de teatro clásico y muy probablemente el Stone&Music Festival, que se van a mantener y en otras ciudades no habrá festivales.

-¿Se sabe algo de la azucarera?

-Me consta que la Junta de Extremadura ya se ha puesto en contacto con la empresa para ver qué planes de futuro tiene sobre la continuidad del proyecto. No tengo ninguna certeza ni a favor ni en contra. La única empresa que ha mantenido su plan de negocio es Mercadona, que se instalará en una superficie comercial en el entorno de los Salesianos. También hay muchas solicitudes de plantas fotovoltaicas y es probable que antes de final de año empiece la construcción de alguna.

-¿Se puede decir que Mérida está volviendo a la normalidad?

-En el tema de obra pública sí. A primeros de julio tendremos otro presupuesto que he acordado con los grupos políticos para presentar nuevos proyectos en el marco de las Inversiones Financieramente Sostenibles (IFS), como mejoras en el recinto ferial, en viales públicos de muchas zonas de la ciudad y en pistas deportivas.

-¿Qué retos se ha propuesto lograr a corto plazo?

-A corto plazo nos planteamos contribuir a la recuperación económica de la ciudad, en la medida de nuestras posibilidades. Otro gran reto del próximo año de la legislatura será acometer una reforma integral del centro urbano de Mérida para hacerlo más sostenible, que incluirá la instalación de plataforma única.