La Delegación de Parques y Jardines reiteró ayer que "la solución más lógica" para la palmera centenaria de la plaza de España era la tala, "por el riesgo de fractura" ante la celebración de la Cabalgata de Reyes. "Era un riesgo evidente para los ciudadanos y ante ello se ha optado por la seguridad", apuntó el delegado del área, Marcos Antonio Guijarro, que lamenta que el árbol haya tenido que retirarse.

Frente a las críticas recibidas por parte de Adenex, Guijarro explicó que tras proceder a la retirada total del tronco, se ha observado "una importante pudrición interna desde el punto estimado de fractura hasta la base". Según el delegado, fue la policía local quien, el pasado día 4 al mediodía, alertó a la delegación de la inclinación de la palmera más próxima a la sede de Presidencia, algo que "podía comprobarse a simple vista en el lugar". Como prueba, Guijarro se refirió a los cables del alumbrado navideño, que estaban "anormalmente tensos".