Cualquier esfuerzo es ínfimo a cambio de lograr la sonrisa de un niño, y la de Yeray Bayón Risco, de cuatro años, se ha convertido en el centro de un movimiento solidario que busca mejorar su calidad de vida y la de otros niños que como él sufren parálisis cerebral o tienen alguna otra discapacidad. Por ello se ha creado recientemente la Asociación Caminando con Yeray, para garantizar que el pequeño pueda acceder a las pruebas y tratamientos médicos que necesite contribuyendo así a mejorar su autonomía personal, pero también nace con el compromiso de impulsar programas, servicios y actividades para atender las necesidades de otros jóvenes con discapacidad y sus familias.

Tras un parto largo y complicado, Esther Risco daba a luz a Yeray un 4 de marzo de 2011, fecha que marcaría el devenir de su madre y de su padre Iván Bayón, pues desde ese mismo día todo empezó a girar en torno a él. El esfuerzo y la dedicación de sus progenitores, que no han parado de moverse promoviendo iniciativas para costear los tratamientos, ha hecho que rostros muy conocidos como Pedro García Aguado, Nacho Montes, Vanesa Martín o India Martínez hayan colaborado. De hecho, hay varias formas de ayudar a Yeray, bien mediante el apadrinamiento, con aportaciones económicas, como embajador contando su caso a otras personas o participando en sus eventos, entre otras opciones que pueden consultarse en la página web.

La presentación oficial de la asociación tuvo lugar el pasado jueves en el centro cultural Alcazaba, en un acto público que contó con actuaciones musicales y charlas sobre los dos tratamientos principales que sigue Yeray en la actualidad: la terapia therasuit y la medicina hiperbárica. "Lo que consigue la cámara hiperbárica es regenerar todo lo que tengas en tu cuerpo en mal estado, y en Yeray está demostrado que de una resonancia a otra ha mejorado bastante", explica Iván Bayón, quien destaca por otra parte que el método therasuit "le proporciona más movilidad". Sobre este asunto, reconoce que en el primer año de vida de Yeray su mujer y él estaban perdidos, en "estado de shock", pero asegura que gracias a otras familias han dado con los tratamientos que más benefician al pequeño. Esto les ha movido a poner en marcha la asociación, para así poder aconsejar y ayudar a otros padres, instituciones de discapacitados y, en definitiva, desarrollar las herramientas que permitan la integración de los pequeños.

Aunque el objetivo actual de la asociación es conseguir una cámara hiperbárica para Yeray, que cuesta 36.000 euros, ya tienen en marcha un proyecto para costear durante un año los tratamientos de psicología y logopedia que necesite una niña con discapacidad intelectual, y que se obtendrá de lo que se recaude en los premios El Puntazo. "No vamos a dar dinero a los padres, sino a pagar terapias y aparatos ortopédicos para los niños", puntualiza Bayón. Para ello, el siguiente evento será una gala benéfica de magia, que se celebrará el próximo 20 de febrero en el centro cultural Alcazaba.

"Mi hijo siempre se está riendo, incluso en las terapias que son muy intensas, y estoy cien por cien seguro de que siente y que se da cuenta de todo", sostiene Bayón, que junto a su hijo lleva ya tres años participando en maratones, lo que ha hecho que Yeray sea el único niño con parálisis cerebral que ha terminado un triatlón en España. Y es que Yeray "te lo agradece todo", y eso es lo que sin duda mueve a sus padres para seguir apostando por la felicidad de este pequeño gran luchador.