La piscina climatizada municipal no abrirá sus puertas de nuevo hasta el próximo verano si se confirman las previsiones más pesimistas, la de tirar el techo para hacer uno nuevo ante el pésimo estado en que se encuentra la cubierta.

Eso es al menos lo que indica un informe del ingeniero que lleva la obra, en el que indica que el techo está hundido y que las vigas de hierro que cruzan el tejado podían estar resentidas.