La salida ha comenzado. La presentación de tres candidatos a la alcaldía de Mérida se ha celebrado este fin de semana. El PP ha presentado su lista y ha eliminado a los que ya adelantamos. Desaparecen Primitivo Muñoz y Miguel Valdés, al que mandan al número dieciocho, que es lo mismo que ponerlo en la calle. Es posible que le hayan hecho alguna promesa de última hora. Sí se ha querido ir por asuntos personales Julia Ferreira, y va el diecisiete; que Valdés vaya detrás, no cuadra. Si ha aceptado debe ser por alguna causa o bien porque es muy disciplinado, y si el partido dice que hay que estar, se está sin tener responsabilidades políticas y a darlas todas.

Se confirmó la lista, y sólo la inclusión de Marta Calamonte es novedad. Estaba claro que era mujer la sorpresa. Se habló con una separada, no cuajó; tampoco cuajó la casada, y se optó por la soltera. Aparece Marta Calamonte, conocida deportista de gimnasia rítmica y de alta competición nacional e internacional. De deportes no anda mal la lista: Fernando Molina y Manuel Gámez son licenciados en Educación Física, y Alfredo de la Rubia, médico, pero perteneció al equipo nacional de rugby.

Este fin de semana otras dos candidaturas. Por el PIMC, Juan Manuel Romera, que dice estar seguro de ser la llave de la Alcaldía. Este llavero lo quiere tener también Marías Jesús Checa del SIEX, y quien lo ha tenido en determinados momentos ha sido Vicente Ramírez, de IU. De EU, con Ricardo Ordóñez, no se sabe nada. Le debe estar costando trabajo confeccionar la lista.

El candidato por el PSOE Angel Calle está seguro de su victoria y de sus posibilidades ante la ciudad como alcalde, pero Pedro Acedo, candidato por el PP, dice que la mayoría absoluta la tiene garantizada.

Lo dicho, lo más seguro es que cualquiera sabe, y la solución será el 25-M. La sorpresa está garantizada y el partido que tome el puesto en la oposición, si no hay mayoría absoluta, tendrá trabajo.