La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Mérida y Comarca considera que el monumento que se levante en homenaje a los fusilados durante la Guerra Civil y postguerra esté colocado fuera del cementerio, junto a la tapia exterior.

La concejala Julia Ferreira, manifestó que el sitio ideal sería la parte nueva del cementerio, donde hay espacio suficiente para instalarlo en una zona ajardinada.

Pero la asociación defiende que sea fuera, "porque fue donde muchos emeritenses perdieron la vida y dentro del camposanto el monumento deja de tener sentido". El monolito tendrá grabados los nombres de las personas fusiladas en las tapias tras averiguar su identidad.

También proponen que el convento de San Andrés, que fue cárcel tras la guerra, sea un centro de interpretación de la paz.