La policía local iniciará el 2 de febrero una campaña de control para informar a los conductores de ciclomotores y quads que está obligados a pasar la ITV desde septiembre del 2006. Si no la han pasado se les tomará nota y si en otro control los vuelven a parar y no han ido a la ITV le multarán a través de la la Jefatura Provincial de Tráfico. La infracción conlleva una sanción de 150 euros y la inmovilización del vehículo.

La campaña, que también incidirá en las infracciones habituales como uso del casco, espejo, ruido o edad para llevar acompañante, se prolongará hasta el 21 de junio. Y si presentan deficiencias técnicas, como falta de luces o ruedas lisas, serán inmovilizados.