El Presupuesto Municipal de Mérida para el 2009 supera los 70 millones de euros, con un descenso del 12,1% en los gastos y del 11,32 en los ingresos. Se trata, según dice el alcalde, Ángel Calle, de unos presupuestos austeros pero en los que se potencia la creación de empleo y la mejora de los servicios sociales y de la seguridad ciudadana. Las cuentas serán debatidas mañana en el Pleno Municipal.Según declaraciones de Calle recogidas por Efe, se trata de unas cuentas "absolutamente equilibradas, realistas, austeras y rigurosas" que, además, tienen en cuenta la mala situación económica y la necesidad de atender a los colectivos sociales más desfavorecidos, entre ellos los parados, las personas en riesgo de exclusión social y las personas con discapacidad.El alcalde explica que los gastos descienden hasta los 70,8 millones y que los ingresos también lo hacen hasta los 74,5 millones. Esta bajada se debe a la bajada del capítulo de inversiones del consistorio que el próximo año será de 14,9 millones, lo que supone un descenso del 49,69% con respecto al año anterior.Calle explica que estos números responden a la necesidad de afrontar la actual situación económica y que, por esto, están muy influenciados por el Plan de Saneamiento Económico que entre el 2009 y el 2011 desarrollará el Consistorio Municipal.En cuanto a los gastos, ha dicho que se experimentan subidas en la gestión de la recogida de basuras y de las zonas verdes pero que, sobre todo, se centran en la creación de más de 600 empleos eventuales mediante iniciativas como el Pacto Local por el Empleo y la inversión de 2,5 millones de euros de fondos propios. También se fomentará la creación de empleo gracias a las obras del Plan Urban y la Sociedad Mixta Turística.Además, sube un 6% el presupuestos de los Servicios Sociales y la partida de Seguridad Ciudadana, para lo que se invertirá en la creación de más de 20 plazas de policía locales para mejorar la atención a los barrios.Con respecto a los ingresos, se negocia con las entidades financieras la ampliación de los plazos de vencimiento de las operaciones de crédito, lo que hará bajar la deuda y los intereses en un 25,9%, y se cobrarán unos 750.000 más en concepto de IBI gracias a la "persecución del fraude", es decir, el descubrimiento de viviendas y garajes no dados de alta.Además, subirán en unos 600.000 euros las aportaciones del Estado, en unos 500.000 euros lo cobrado por impuestos por construcción y en 600.000 lo recaudado por licencias de obras menores.