E puerto seco Santa Eulalia de Mérida ha multiplicado por cuatro el número de contenedores con mercancías que mueven desde la estación ferroviaria, que ha pasado de los 1.000 contenedores en el 2005 a los 4.000 que lo hicieron el pasado año.

La gestión del puerto seco lo lleva a cabo una empresa mixta hispano-portuguesa y se trata de una plataforma ferroviaria de distribución de mercancías hacia distintos puertos marítimos de la península.

Gracias a esta iniciativa pudo reanudarse el transporte de mercancías con el puerto de Lisboa y luego se amplió a los del sur de España, uniendo la capital portuguesa con Sevilla a través de Mérida, convirtiéndose así en un nudo de intercambio internacional de mercancías.

Además, una de las ventajas del corredor de Sevilla es que ha permitido a los empresarios extremeños llevar productos a Canarias y al norte de Europa.

El responsable de esta empresa en Mérida, Ramón Sánchez Ocaña, manifestó que están pendientes de que les den autorización para operar con los puertos del Levante, a través de Madrid, conectando así el oceano Atlántico con el Mediterráneo, "pero todavía no lo hemos conseguido, aunque seguimos intentándolo".

PLENO RENDIMIENTO En Extremadura se mueven anualmente entre 15.000 y 16.000 contenedores y, de momento, los objetivos del puerto seco de la capital autonómica se están cumpliendo, "estamos progresando", afirmó Sánchez Ocaña, aunque precisó que son conscientes de que pueden ir a más, ya que la terminal de Renfe, cuando funcionaba a pleno rendimiento, fletaba con facilidad 5.000 contenedores.

Una de las ventajas de este sistema de transporte es que abarata los costes y viene bien al tipo de mercancías que se mueven por la región, como piedras, tomates y aceitunas, principalmente, que en su mayor parte van dirigidas a la exportación. Así, el 90% de las mercancías son para la exportación y el resto 10% restante a la importación.

Los productos que se suelen exportar son tabaco, tomate, aceituna, corcho y vino, mientras que se importan productos como cervezas, aceitunas y bidones vacíos.