Agentes del Cuerpo Nacional de Policía adscritos a la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Local de Mérida, en colaboración con la Brigada de patrimonio histórico de la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta, han detenido el pasado día 21 de febrero a dos personas por su presunta autoría de un delito de hurto, y a la recuperación de una "valiosa" colección de antiguas monedas de oro y plata de los siglos XVIII, XIX y XX.

El detonante de esta "compleja" operación fue la adquisición, por parte de una tienda de compra-venta de oro de Mérida, de una gran cantidad de monedas de oro, y la posterior adquisición de otra importante cantidad de monedas de plata, provenientes de los mismos vendedores particulares, lo que hizo sospechar que dichos objetos podrían provenir de "algún hecho ilícito",

A través de las gestiones realizadas, los agentes pudieron determinar que dichas monedas pertenecían a una "importantísima" colección privada sustraída en un domicilio de Alcobendas (Madrid), entre diciembre de 2010 y enero de este año.

Las monedas, cerca de 500, son de un "extraordinario valor" tanto por su antigüedad, pues comprenden entre los siglos XVIII, XIX y XX, como por su rareza, ya que pertenecen tanto a España como a una gran cantidad de países extranjeros, formando parte, algunas de ellas, de ediciones limitadas, que pudo conseguir su legítimo propietario ya que durante años fue empleado en el Banco de España, lo que lo convirtió en experto numismático.

Las investigaciones dieron como resultado la identificación de los autores de estos hechos, que fueron detenidos el pasado día 21 de febrero. En concreto, se trata de un hombre de 50 años, que responde a las iniciales de J.P.A, con amplio historial delictivo, y una mujer de 23 años de edad que responde a las iniciales T.M.A, carente de antecedentes, vecinos ambos de la localidad de Valdecaballeros (Badajoz), en cuyo domicilio, y con la pertinente autorización judicial, se practicó la diligencia de entrada y registro.

Ambos detenidos, la tramitación del atesado policial, fueron puestos, junto con los objetos incautados, a disposición de la autoridad judicial, quien decretó su puesta en libertad provisional con cargos.