El ayuntamiento, a través de la Delegación de obras, comenzó ayer en la calle Holguín la primera fase del proyecto denominado Mejora de infraestructura urbana en las calles del centro histórico .

Los trabajos, que afectarán a una docena de calles, se prolongarán entre seis y ocho meses y cuentan con un presupuesto de 1,2 millones de euros. Las obras han sido adjudicadas al Grupo Dico.

La calle que más problemas presentará será la de Santa Eulalia, por la que pasan a diario miles de emeritenses y turistas y donde se concentran un gran número de locales comerciales.

Para causar las menos molestias posibles, se estudia que los trabajos se realicen en horario nocturno, una vez que cierren las tiendas, aunque puede encarecer más las obras, gasto que, según fuente municipales, ya ha asumido el equipo de gobierno.

Las obras consistirán en cambiar el suelo actual de las calles Santa Eulalia, un tramo de Berzocana, un tramo de Moreno de Vargas, Manos Alba, Santa Catalina, Juan Pablo Forner y Alonso Zamora Vicente por otro de granito; y la pavimentación mixta con adoquines y hormigón en las calles Berzocana, San José y Las Torres.

Además, las calles Holguín y un tramo de Castelar serán de pavimentación mixta con adoquines de granito.

El proyecto también incluye un nuevo alumbrado en la calle Santa Eulalia y el soterramiento de los cables que cruzan la calle.

En cuanto a la calle Holguín, las obras comenzaron desde la entrada por Correos, por lo que el acceso a los vehículos de los residentes se hace por las calles Obispo y Arco y San Salvador. Además, la empresa irá avisando a los residentes en estas vías del desarrollo de los trabajos y de los cortes que se hagan.