El vicepresidente de la Junta afirmó que "Acedo es un indocumentado en su sentido literal, es decir, que habla sin conocer ni aportar documentos". Sánchez Polo respondía así a las declaraciones del alcalde donde éste indicó que el Grupo Popular en el Congreso no cuestionó los atributos de capitalidad de Mérida cuando se aprobó el Estatuto de Autonomía, porque entonces tal Grupo no existía.

El vicepresidente esgrimió, entre otros documentos, el acta de la sesión de una comisión del Congreso que examinó el asunto el 18 de enero de 1983, donde Luis Ramallo intervino como representante del Grupo Popular y Francisco Fuentes en nombre del PSOE.

En dicha sesión, Ramallo defendió que se aceptase la capitalidad de Mérida, pero dejando que fuese luego la Asamblea de Extremadura la que determinase dónde se ubicarían las instituciones. Sin embargo, Fuentes insistió en que el Estatuto recogiese que Mérida no sólo sería la capital, sino también sede de la Junta y el Parlamento regional.