Agustín Tarazona no tendrá que rendir cuentas ante la Justicia por la suspensión del concierto que el cantaor José Mercé tenía previsto ofrecer el 10 de junio del 2006.

A través de su empresa organizó una actuación que no se celebró al negarse el artista a que le pagaran en efectivo la mitad del ´caché´ acordado, como es habitual.

El concierto no se celebró y Tarazona entregó un cheque sin fondos al hotel para cubrir el alquiler del auditorio. Los abogados del hotel consiguieron cobrar la cantidad pactada, por lo que al final se decidió no continuar con la vía judicial.