Las trabajadoras del servicio de limpieza de edificios públicos no descartan la posibilidad de celebrar encierros e incluso de paralizar el servicio si continúa el proceso de privatización anunciado por el ayuntamiento, y contra el que ayer se manifestaron por el centro de la ciudad.

El delegado del sindicato Comisiones Obreras en el ayuntamiento, Juan Luis Lancho, señaló ayer que continuarán las concentraciones todos los jueves, y que la semana próxima el sindicato mantendrá una reunión con asociaciones de padres de alumnos y los directores de los colegios de la ciudad para explicarles el problema. Además, indicó que estarán presentes en todos los plenos.

El representante sindical de las trabajadoras aseguró que el equipo de Gobierno quiere privatizar el servicio por "venganza por las diez manifestaciones que convocamos cuando pedíamos la asignación de centros", aunque insistió en que "si hace falta paralizar el servicio, se hará".

Lancho criticó la falta de material y personal en el servicio, que implica "un sobre esfuerzo para las limpiadoras, que sufren por este motivo enfermedades laborales", y pidió que se celebre un debate público, en el que participen los sindicatos y el ayuntamiento "para contrarrestar sus datos con los nuestros".

Además de los sindicatos CCOO y UGT, participaron en la protesta concejales del PSOE y representantes de Izquierda Unida, que se ha mostrado contrario a la privatización del servicio.