La entrada al Hospital de Mérida se va a regular mediante un sistema de tornos. Ya están instalados en la entrada principal del recinto hospitalario a la espera de entrar en funcionamiento. Esta medida pretende controlar el acceso de las visitas a los pacientes, aunque también será utilizado por el personal del centro.

El objetivo es impedir la entrada descontrolada de personas ajenas al Hospital, en su gran mayoría familiares que visitan a los enfermos. Actualmente se permite la entrada de dos personas por paciente, un régimen que se cumple pocas veces, ocasionando molestias al resto de los enfermos y de los trabajadores del hospital.

Los tornos se regularán con un programa informático compatible con el sistema de control de altas y bajas hospitalarias. En caso de una emergencia que hiciera necesaria una evacuación, quedarían anulados. Las obras en el hospital han contribuido a que el acceso al recinto se haya descontrolado en los últimos años, debido a la dificultad que entraña vigilar todas las puertas y por la cantidad de obreros que entraban en las instalaciones.