El proyecto está subvencionado en gran parte por la Consejería de Educación, Ciencia y Tecnología, a través de los programas I+D, en colaboración con el Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida.

Parte de la planta baja del edificio en el que han aparecido las pinturas debe cederse ahora al ayuntamiento. Además, Mateos ha explicado que el proyecto cuenta con el acuerdo total del propietario del inmueble.

Barrientos asegura que en Mérida hay pocas pinturas de este nivel y en tan buen estado de conservación.